El presidente AMLO, dejo fuera de los negocios a estas agrupaciones, como Antorcha Campesina y Vanguardia Campesina, ya no hay moches se acabo dice el presidente, ahí esta la respuesta no dejaremos que se construya en este estado de Veracruz, es una advertencia para el gobierno federal
PAPANTLA VERACRUZ.- Líderes de agricultores y campesinos liderados por antorcha campesina se oponen rotundamente al corredor transístmico Coatzacoalcos-Salinas Cruz es uno de los 100 proyectos que se pretenden implementar en Veracruz y uno de los tres más importantes del gobierno actual, sin embargo, redes de resistencia y rebeldía, colectivos, organizaciones y personas adherentes a la sexta declaración de la selva rechazan estos megaproyectos y se unieron en la “acción global contra los Megaproyectos”, que se llevó a cabo en el Totonacapan, en donde dijeron que en tiempos de pandemia siguen despojando a los pueblos del Totonacapan.
Entre los proyectos que hay en Veracruz, dijeron que son hidroeléctricas con diversas afectaciones, incremento de la explotación de hidrocarburos a través del fracking, cambios de uso de suelo para los monocultivos y las granjas de animales a gran escala, la ampliación de los reactores de Laguna Verde, los proyectos de minería.
Pero que éstos no son aceptados y reiteran que están en contra del despojo y los proyectos de muerte en la “acción global contra los Megaproyectos” realizada del 02 al 09 de agosto por los pueblos, “manifestamos nuestro rechazo a la imposición de proyectos de muerte en todo el país, y nos hermanamos a la lucha de los pueblos mayas en contra del tren espurio mal llamado maya, nos hermanamos a la lucha de los pueblos del Istmo en Oaxaca y Veracruz que resisten dignamente a la muerte hoy disfrazada de proyectos de supuesto desarrollo”.
Los asistentes se solidarizaron contra los despojos de tierras y aguas, con quienes resisten a la imposición de siembras de semillas modificadas y transgénicas; de quienes buscan a sus familiares desaparecidos, con pueblos comunidades, colectivas que luchas contra las violencias, con las guardianas y guardianes del territorio, con las cuidadoras y cuidadores, con las sanadoras y sanadores, con las y los protectores de los conocimientos de las abuelas y los abuelos, con las buscadoras y buscadores de desaparecidos.
Señalaron que los empresarios proponen muerte, llaman desarrollo al etnocidio y a la aniquilación de la vida, ellos llaman desarrollo a las violencias sobre nuestros derechos y sobre la vida, llaman desarrollo al capital que pretende devorar, despojar y acabar nuestra gran riqueza, nuestra diversidad, nuestra historia milenaria y nuestras maravillosas identidades de pueblos originarios.
Las comunidades del Totonacapan, que son parte del Congreso Nacional Indígena, se comprometen a seguir defendiendo y cuidando el territorio, “ni los dueños del capital, ni los gobiernos, ni sus narcos y policías son dueños del territorio que nos cobija. Denunciamos que por muchos años en las huastecas y en totonacapan han depredado el territorio con proyectos de exploración y explotación de los yacimientos de hidrocarburos, antes fue Pemex, ahora son decenas de empresas privadas, nacionales y trasnacionales, que enferman nuestras tierras, que las degradan, que las contaminan, que roban nuestra agua, que ensucian con derrames nuestras parcelas, manantiales y arroyos. También los gobiernos y sus policías y narcos han vestido de luto a nuestras comunidades”.
Denunciamos que los gobiernos y las empresas siguen despojando a nuestros pueblos de sus tierras para introducir ductos de hidrocarburos o gasoductos, ya hay cientos de pozos en el totonacapan realizando fracturación hidráulica, aunque en las mañaneras se simulan declaraciones en las que supuestamente ya no se permite la técnica de fracking.
En estos tiempos de pandemia el capital sigue explotando los yacimientos de los pozos de hidrocarburos en el totonacapan, los huachicoleros siguen robando hidrocarburos y gas, el crimen organizado o autorizado, sigue asesinando, secuestrando o desapareciendo a las y los jóvenes en el Totonacapan, los líderes campesinos echan la culpa directamente al presidente Andrés Manuel López Obrador.