La sociedad Veracruzana le pide al exfiscal que dé la cara y que se defienda ante los tribunales judiciales, para terminar con las especulaciones.
Xalapa Ver.- Jorge Winckler, quien fue separado temporalmente del cargo como fiscal de Veracruz, advirtió que el ministerio público lo acusa de secuestro, faltando absolutamente a su deber de lealtad, pues no incorporó elementos probatorios que ya estaban en la carpeta de investigación y que demuestran que no existió tal delito.
En carta abierta a medios, sin que aún se corrobore su autenticidad, se refirió a la orden de aprehensión girada en su contra y de cuatro colaboradores por el presunto secuestro de Francisco “N”, jefe de ayudantes del ex Fiscal Luis Ángel Bravo, quien acusa que fue retenido para obtener información del paradero del ex fiscal.
“Desgraciadamente, pareciera que no importa la verdad con tal de seguir con esta persecución política. Que no importa aliarse con los intereses de Javier Duarte, quien, por cierto, celebró vía Twitter que se esté persiguiendo a quien terminó con su impunidad y la de sus colaboradores, responsables del mayor saqueo en la historia del país y quienes además instrumentaron una política sistemática de violación a derechos fundamentales. Sin embargo, como hombre de leyes, confió en las Instituciones y la Justicia”, señaló.
Winckler aseguró estar convencido que la verdad terminará por imponerse, y que las endebles acusaciones en su contra serán “exhibidas en su falsedad”.
Enfatizó que los hechos que pretenden imputarle jamás existieron. Y explicó que “un juez federal resolvió el amparo 421/2018, y el amparo de revisión 299/2018, donde se determinó que no existió desaparición forzada, ni privación de la libertad, incomunicación o tortura”.
“Ambas resoluciones son claras y se encuentran disponibles en versión pública para quien quiera consultarlas. En ellas, se hace mención a un elemento probatorio contundente: La noche en que supuestamente se encontraba secuestrado el denunciante, un Actuario Federal logró certificar en un documento que incluso tiene la firma de la supuesta víctima, que no se encontraba detenido, ni privado de la libertad y que señaló que no había sido objeto de maltrato”.
Dice asimismo que dicho documento “tiene valor probatorio pleno, ya que el Actuario Federal cuenta con Fe Pública”.
Aunado a lo anterior, existe firme un no ejercicio de la acción penal con relación a los hechos, que torna ilegal la pretensión de pretender imputarle con relación a los mismos hechos en una Carpeta de Investigación diversa, de conformidad con lo establecido por el artículo 255 del Código Nacional de Procedimientos Penales.
Se presume según fuentes confiables que Winckler podría estar escondido en una finca del estado de puebla, esperando instrucciones de su jefe Miguel Ángel Yunes Linares.